Mi terraza

Esta es una entrada distinta, no es una receta, aunque incluye hierbabuena, albahaca y pimientos. Ya en alguna ocasión he hablado de mi terraza, no es muy grande, pero me encanta estar en ella. Cuando me levanto por la mañana y los niños aún duermen, me preparo mi café y  mi tostada y  desayuno viendo como levanta el día, es una gozada.
Salgo muy a menudo a la terraza, por las tardes nos tomamos un cafecito mi marido y yo, o un aperitivo los fines de semana, y algunas noches disfrutamos de un mojito y una partida de cartas, como veréis aunque es pequeña le saco mucho partido.
Además tengo mis plantas, a las que mimo y me paso el día contemplando, y he pensado en presentároslas

Estos son los nuevos pimientos que están saliendo en la parte de arriba de la pimentera, que tuvo que ser rescatada del ataque de los pulgones

La hierbabuena que sobrevivió a las orugas

Esta planta nosotros la conocemos como "la suegra y la nuera" es un nombre popular dado con una pizca de maldad, ya que se llama así porque solo tiene dos flores, que salen del mismo tallo y cada una mira para un lado, están como si no se hablaran. Hoy se ha abierto una de ellas, lo cual es un milagro porque tenía el tiesto con una hojita medio muerta y abandonada, y un día que había preparado reverdeciente me sobro apenas un chorrito y se lo echamos a ver que pasaba y en cuestión de días se nos puso como está en la foto, así que aquí tenéis otra superviviente

En el alfeizar de la ventana tengo una planta de albahaca, la hemos dejado ahí porque se supone que repele los mosquitos (ya sabéis que mi cámara está caput  por eso no se aprecia bien el verde tan bonito que tiene)

Y para terminar os dejo a los cactus que crecen como la espuma contra todo pronostico, llueva, nieve, granice, hiele o haga un sol abrasador no hay clima que acabe con ellos

Y el que asoma entre las cortinas es mi hijo mayor.

Esta es mi terraza y su trocito de naturaleza viva, ornamental y funcional